En el mundo de las nuevas tecnologías, algunas de las plataformas que más éxito están teniendo son las conocidas apps. Las aplicaciones, normalmente para móviles, pero aptas para muchos dispositivos, son sistemas con distintas funcionalidades que te permiten realizar unas u otras acciones. Hay aplicaciones diseñadas para comunicarse, para diseñar, para organizarse mejor el tiempo, para jugar, para identificar canciones… hay tantas apps como acciones se te ocurran. Se trata de un negocio seguro, ya que no hay nadie que no utilice al menos una o dos al día. Yo, sin ir más lejos, utilizo más de seis al día, entre la aplicación que me permite escuchar música, la que utilizo para hablar con mis contactos y las que consulto como redes sociales.
Sin embargo, la originalidad o la funcionalidad de una aplicación no es lo único que hará que triunfe. Hay muchas aplicaciones diseñadas con fines muy similares y, sin embargo, suele ser únicamente una la que triunfa en ese campo. Evidentemente, la publicidad es un factor de vital importancia a la hora de hacer que una aplicación despegue. No solo la publicidad pagada, sino también la que genera el público cuando comienzan a poner en boca de todos lo bien que funciona una aplicación o lo útil que resulta. No obstante, una de las cosas que más tenemos que tener en cuenta a la hora de crear una aplicación, es el diseño.
El diseño es de vital importancia y puede marcar la diferencia entre una aplicación de éxito y una que apenas llega a ver la luz. Si estás pensando en crear una aplicación, y quieres asegurarte de que el diseño de su funcionamiento y de su interfaz es lo que el público necesita y va a buscar, voy a darte algunos consejos básicos para conseguir que tu aplicación despegue y sea un éxito.
Consejos para diseñar correctamente una app
Seguramente tú, tanto a modo de creador como a modo de usuario, habrás experimentado muchas apps a lo largo de tu vida. Te habrás dado cuenta de que muchas de ellas comparten algunos rasgos de diseño, y eso es porque esos mismos rasgos son los que provocan que una aplicación tenga éxito y que otra no. Si buscar optimizar el diseño de tu aplicación, estas son algunas de las cosas más básicas que debes tener en cuenta:
Debe ser intuitiva. El diseño de tu aplicación debe ser intuitivo, porque de lo contrario resultará tedioso utilizarla y no conseguirás que la gente le pille el truco. Una app con una interfaz sencilla y clara, no necesariamente sobrecargada con información, puede garantizarte el éxito. La clave está en asegurarse de que el usuario es capaz de manejarse dentro de la aplicación sin necesidad de que nadie le explique de manera explícita cómo hacerlo.
Debe ser atractiva. Algo importante a tener en cuenta a la hora de diseñar una app es estar al tanto de las tendencias en tu campo. Tal vez tienes una idea en mente, pero una vez la ves en la práctica parece obsoleta en comparación con otras. Tienes que buscar que tu aplicación resulte atractiva, que tenga un aspecto moderno, cuidar la tipografía. El diseño de tu aplicación viene a ser su aspecto físico, y es lo que acusará una primera impresión. Las primeras impresiones cuentan mucho y es necesario tenerlas en cuenta, por eso tienes que prestar mucha atención al diseño.
Fácil de mirar. Esto suena extraño, pero tiene sentido, y va en relación a la idea de ser atractiva. Puedes estar pensando en una aplicación divertida, original, llamativa y colorida. Sin embargo, tienes que tener muy presentes las diferentes formas de combinar colores. No crees una aplicación con colores muy chillones o con colores que no combinen bien entre ellos, como rojo y amarillo, porque al usuario le costará leer los mensajes y acabará sintiéndose incómodo utilizando la aplicación, ya que provocará mareos.
Estas son algunas de las cosas más importantes que tienes que tener en cuenta a la hora de diseñar la interfaz de tu aplicación. Pueden parecer tontadas, pero es en los detalles más imperceptibles donde se encuentra la diferencia entre el éxito y el fracaso.