Como ya debes saber, las etiquetas RFID (identificación por radiofrecuencia) son dispositivos de tamaño pequeño que pueden ser incorporados o adheridos a cualquier tipo de producto, haciendo que esta tecnología de almacenamiento de datos pueda funcionar de manera inalámbrica mediante un único chip que es el que se encarga del almacenaje de todo tipo de datos que sean necesarios recabar sobre el producto.
A lo largo de este artículo te contamos las numerosas ventajas de contar con este tipo de tecnología y por qué deberías instalarlo.
Beneficios de instalar sistemas RFID
Almacenar datos
Uno de los mayores beneficios del sistema RFID es su alta capacidad para almacenar datos, tanto en lo referente a volumen casi infinito de datos como en la variedad de los mismos. Esta es una característica muy valorada por las empresas, ya que permite ganar un mayor grado de conocimiento del producto en sí, por lo que no es de extrañar que las etiquetas RFID hayan conseguido hacerse un notorio hueco en el mercado empresarial.
Velocidad de registro sin visión directa
Son una alternativa mejorada frente a otros tipos de sistemas de identificación, como es el caso de los códigos de barras, en especial en lo referente a la velocidad de su registro y de lectura de datos de estas etiquetas inteligentes, que supera de manera exponencial a los códigos de barras, siendo 25 veces más veloz. Además, ofrecen la enorme ventaja de que los lectores con sistema RFID no requieren una línea de visión directa para poder identificar los artículos con estas etiquetas siendo capaces de realizar la lectura, aunque estén a varios metros de distancia (fuente: therfidstore.eu).
Seguridad de los datos
Otra de las ventajas más importantes del sistema RFID es que la información está protegida y asegurada, haciendo que falsificación sea de extrema dificultad. Tanto es así que estos sistemas inteligentes están siendo utilizados en cerraduras y carteras, para proteger el contenido de las mismas, e incluso algunos países lo utilizan en sus pasaportes, para evitar que sean robados y falsificados.
Fiabilidad e integración en el software
Por supuesto, de poco serviría que los sistemas RFID tuviesen una alta capacidad de almacenamiento si no fuesen fiables en las lecturas que realizan, pero lo cierto es que esta tecnología inteligente es de gran precisión y fiabilidad. Pese a que exista una enorme cantidad de stock, podrás tener la seguridad de que los datos trasladados serán los correctos. Además, pueden ser integrados a los softwares de control, por lo que la compañía que contrate un sistema RFID verá su proceso de tomas de decisiones mejorada.
Mayor vida útil
El sistema RFID tiene una alta durabilidad, ya que no se estropea con facilidad, algo que implica que implementar este tipo de sistema tecnológico equivale a amortizar rápidamente su coste.
Productos con sistema RFID
La arquitectura de un sistema RFID es más sencilla de lo que pueda parecer en un inicio. Consta de una etiqueta RFID (transpondedor) que cuenta con un chip encapsulado donde se recogerá toda la información; una antena, que será la responsable de hacer que el chip que contiene la información sea capaz de transmitirla; y también de un lector que decodificará la información y la transmitirá al sistema de procesamiento de datos.
También es importante destacar las impresoras RFID o codificadores, que son las que podrán leer, escribir e imprimir estas etiquetas inteligentes para dotarlas de la visibilidad serializada característica de esta tecnología.
Además, también se han puesto de moda las cerraduras que utilizan sistemas RFID, que consigue que se evite la vulnerabilidad de nuestros domicilios o locales comerciales ante la amenaza de intrusos a través de llaves inteligentes que se encargan del bloqueo o la apertura de puertas. Similar a este uso, también son utilizadas en carteras y monederos, como te hemos dicho anteriormente. Con esta tecnología se evita que ciertas ondas electromagnéticas puedan penetrar en las carteras para acceder a las tarjetas bancarias que guardamos en su interior, por lo que protegen ante robos de información y también ante interferencias.